Inditex y Mercadona impulsan el acceso a liquidez de proveedores por la crisis
El gigante textil negocia flexibilizar las condiciones de sus socios y la cadena de supermercados ha pactado ya líneas nuevas por 2.100 millones. El Corte Inglés no descarta sumarse
Inditex negocia acuerdos bilaterales con la banca para mejorar las condiciones de acceso a liquidez del grupo y de sus proveedores. Las conversaciones, según fuentes financieras, no van sólo encaminadas a ampliar en más de 1.000 millones sus líneas de financiación, que ascendían a 6.464 millones a 31 de enero, incluyendo líneas de confirming, líneas de crédito y líneas de overdraft. Lo que está sobre la mesa, además, es dar flexibilidad en el acceso a los proveedores a esta liquidez, lo que podría incluir, incluso, que cobraran antes de la recepción del pedido.
El grupo textil no es el único que está viendo la necesidad de ayudar a sus socios en el momento actual. Mercadona acaba de firmar líneas de confirming por 2.100 millones de euros, tal y como adelantó EXPANSIÓN. Santander, Bankia, CaixaBank y BBVA aportarán en torno a 500 millones cada uno y las líneas vencerán en doce meses, aunque son renovables. El Corte Inglés no descarta realizar movimientos en este sentido, según fuentes financieras.
"Se trata de un procedimiento muy utilizado por grandes empresas del consumo y la alimentación. Desde el inicio de la crisis estos grandes pagadores, conscientes de la necesidad de apoyar a sus proveedores y garantizar su cadena de suministro, han ampliado y reforzado sus líneas de confirming para incrementar las facilidades de financiación", explica Margarita Marugán, directora de Santander Factoring y Confirming.Una fórmula al alza
El confirming, o factoring inverso, permite a los proveedores de una empresa tener un acceso más rápido a liquidez, ya que es el banco el que les abona las facturas de forma instantánea frente al periodo de pago más amplio de las empresas. A cambio, se obtiene un interés, y cuando la empresa abona las cantidades que ha anticipado el banco, la línea de crédito se reinicia.
Para las empresas tiene la ventaja de que mejora la liquidez de sus proveedores sin recurrir a deuda financiera -se considera comercial- y sin tensionar su caja. "Da robustez a la cadena de suministro, diversifica a los proveedores y les da estabilidad y compromiso a largo plazo", explica Alma María Abad, presidenta de la Asociación Española de Factoring (AEF).
No obstante, en este momento, se evidencian más las ventajas para el proveedor. "Es un instrumento de financiación esencial para pymes y autónomos, especialmente en épocas de crisis, en las que asegurar la liquidez es crítico. No consume su riesgo bancario ni requiere de calificaciones o análisis para su concesión; llega tanto a clientes como no clientes del banco; y, en este momento de incertidumbre, elimina el riesgo de impago de los créditos financiados", añade Margarita Marugán, de Banco Santander. "Es un respirador financiero, si se me permite la expresión, para continuar operando en estas circunstancias tan adversas", añade Alma María Abad.Los datos de la AEF muestran que en los últimos cinco años el volumen de crédito a través de esta fórmula se ha disparado, pasando de 59.845 millones en 2015 a 89.463 millones, un 50% más, en 2019. "Supone ya un tercio de la financiación comercial del país", indica su presidenta.
"Una gran mayoría de las compañías lo utilizan en todos los sectores y es previsible pensar que la tendencia se incrementará en el actual contexto por lo que es necesario dotar al sistema bancario de suficiente liquidez", explica Luis Montesinos, senior advisor de PwC y profesor asociado de Finanzas en el IE.Generalizado
"En la actual situación de incertidumbre, ayuda al comprador y a su proveedor a optimizar sus respectivos capitales circulantes. Además, proporciona certeza a los responsables financieros al elaborar las previsiones de caja que son un quebradero de cabeza en los tiempos actuales", añade Montesinos.
Dia tenía líneas de confirming al finalizar 2019 con un límite de 219,7 millones, un 36% más que un año antes, de las que se habían utilizado 219,2 millones, según su informe anual depositado en la CNMV. Carrefour también detalla en sus cuentas el uso de este producto. Según sus últimas cuentas publicadas en el Registro Mercantil, la cadena puso a disposición de sus proveedores líneas de confirming por 520 millones en 2018, un 12% más, de las que se dispusieron 293 millones. Adolfo Domínguez también detallaba en sus últimas cuentas "pólizas de crédito, confirming y líneas de comercio exterior por un límite de 23 millones".
Su uso no es exclusivo de la distribución. Ebro Foods, la mayor empresa de alimentación española, sumaba al finalizar su último ejercicio con cuentas publicadas líneas de confirming, descuento comercial y financiación de comercio exterior con un límite de 33,9 millones, aunque sólo se habían dispuesto 3,4 millones. Un año antes las cifras eran de 47,2 y 27,5 millones.
Argal disponía, por su parte, de 39,75 millones en pólizas de confirming a finales de 2018, un 22% más que un año antes. ElPozo o Campofrío también usan este producto. Aunque no identifican la cuantía, la segunda señala que "suele realizar la práctica totalidad de sus pagos a proveedores a través de confirming".
Moody's alerta de que el principal riesgo de este producto es su uso en exceso, ya que la obligación que crea no aparece como deuda bancaria y, por ello, los inversores no saben su cuantía. Por eso, si la empresa tiene problemas, estos pueden crecer al descubrirse que sus obligaciones son mayores de lo que se piensa, indica la agencia.