CEOE recela de esta última propuesta al considerar que no garantiza la cobertura a todas las empresas que lo necesitan

Los responsables de las patronales CEOE-Cepyme y de los sindicatos UGT y CC OO mantuvieron ayer una primera reunión de carácter técnico con el equipo del Ministerio de Trabajo para negociar las nuevas condiciones para prorrogar los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) más allá del 30 de septiembre.

En este encuentro, las partes abordaron un primer borrador de propuestas que Trabajo les había enviado a última hora del miércoles, por lo que esa falta de tiempo para estudiar el documento fue una de las primeras críticas lanzadas ayer por alguno de los asistentes a la reunión.

Según distintas fuentes, el Gobierno habría planteado a los agentes sociales mantener los ERTE de rebrote –que son por fuerza mayor total y tienen una exoneraciones de cuotas de entre el 60% y el 80% según el tamaño de la plantilla– en caso cierres de empresas que no puedan ejercer su actividad por restricciones normativas ante el aumento de los contagios. Esta modalidad se mantendría para todos los sectores y empresas.

Pero dicho esto, el resto de ayudas a empresas y trabajadores “se centrarán en los sectores que más lo necesiten”, donde podrían incluso aumentar las ayudas, pero se disminuirán en las actividades con menos dificultades. Es lo que desde Trabajo han denominado “protección diferencial, no sectorial”. Sin embargo, tanto los sindicatos como los empresarios habían manifestado, durante la reunión que tuvieron los máximos responsables de esta negociación en Palma el viernes pasado, que eran contrarios a sectorializar las ayudas.

No obstante, en el documento entregado por Trabajo y que fue discutido ayer no se concretaban ni los nuevos porcentajes de exoneraciones de cotizaciones, ni los sectores en los que éstas aumentarían o disminuirían, ni tampoco posibles fechas para la nueva prórroga.

Es por esta falta de concreción y ante la perspectiva de que no se garantice la cobertura a todas las empresas que lo necesitan que desde CEOE recibieron ayer con mucho recelo esta propuesta. También queda para las próximas reuniones –que se celebrarán probablemente todos los días de la semana próxima– concretar si se mantendrá en el 70% de la base reguladora las prestaciones de los beneficiarios de un ERTE tras seis meses de cobro (que es un compromiso del Gobierno) y si los trabajadores que accedan a un ERTE mantendrán intacto sus derechos al desempleo pese a haberlos consumido en la pandemia.