La Asociación Gallega de la Empresa Familiar (Agef) solicita a las administraciones públicas un plan urgente, desburocratizado y fiscalmente competitivo para apoyar a las más de 80.000 compañías gallegas que continúan vivas a pesar de la crisis del coronavirus. “Urge ganar en competitividad fiscal para atraer inversión a Galicia, y eso pasa por bajar impuestos", demanda su presidente, Víctor Nogueira, que sacó pecho del colectivo como "las verdaderas estabilizadoras del empleo" tanto en la anterior crisis como en la actual provocada por la pandemia. "Si lo fiamos todo a la llegada de los fondos europeos para la recuperación -asegura-, vamos a llegar tarde”.

Tarde es ya para las 1.848 compañías que, según la organización, perdió Galicia en estos meses de parón por el COVID-19. La mayoría pymes. Con ellas se fueron también hasta noviembre 15.400 puestos de trabajo. Agef presentó esta mañana en Santiago un plan de propuestas por el empleo en la comunidad donde se aboga por la "competitividad fiscal" para atraer inversiones y "evitar la fuga de empresas", menos burocracia en la tramitación administrativa, apoyo a la solvencia y "coordinación de los proyectos de solicitud de los fondos europeos de reconstrucción".